Bernabé: “El futuro de València pasa por la vivienda industrializada”
- Defiende en el Fòrum Nueva Economía una intervención en materia de vivienda para atajar la escalada de precios y garantizar que los valencianos puedan quedarse en la ciudad
- “Es una situación de emergencia y hay que aplicar medidas valientes en vivienda, incrementar el porcentaje de VPP en PAI y prohibir los apartamentos en zonas residenciales”
La secretaria general de los socialistas en València, Pilar Bernabé, ha hecho un llamamiento para que la ciudad aproveche el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) del gobierno y se convierta en la capital de la vivienda industrializada que dé respuesta a la crisis del precio de los alquileres, que se están multiplicando en todos los barrios desde que Catalá llegó al Ayuntamiento. En este sentido, Bernabé ha apelado a la colaboración público-privada para aprovechar los 1.300 millones que va a invertir el gobierno de España en el PERTE que tendrá su sede en la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) del Puerto de València y ha incidido en que solo con un gobierno socialista en la ciudad València podrá aprovechar todo el potencial de este proyecto del gobierno de España.
Bernabé, en este sentido, ha criticado las políticas que ha implementado María José Catalá en materia de vivienda y que han provocado que València se haya convertido en la gran ciudad donde más han subido los precios de la vivienda. “La primera obligación de los gobernantes proporcionar a sus vecinos el derecho a poder quedarse en su ciudad. Y hay herramientas que ya deberían estar en marcha para garantizar este derecho y que el PP se niega a aplicar como es la Ley de la Vivienda. Al contrario, Catalá ha firmado dos modificaciones que van en la dirección contraria a solucionar el problema de la vivienda: el primero, la eliminación del tanteo y retracto para que las administraciones puedan comprar cualquier vivienda e incorporarla al parque público y la segunda, la supresión de la calificación permanente de las VPP, que ahora pueden volver al mercado libre”, ha dicho.
Lo más grave, ha apuntado, es que Catalá no está aplicando en València ni tan siquiera una herramienta básica como es la declaración de Zona Tensionada que sí han activado otras ciudades como Barcelona. “Desde que se aplica se empieza a notar cómo la curva desciende, que es lo que está pasando en Barcelona, donde de media ha bajado 100 euros. O hacemos esta declaración en València ya o no podremos dar respuesta a nuestros jóvenes y a nuestras familias”, ha incidido.
Sobre las posibles medidas a aplicar en materia de vivienda, Bernabé ha incidido en incrementar el porcentaje de vivienda protegida en los nuevos desarrollos como el del PAI del Grao donde Catalá ha previsto apenas un 15%. “Debemos poner entre un 50 y un 60% de vivienda protegida en los nuevos PAI porque no estaremos en situación de abordar el problema sino es desde el impulso de las administraciones. Hay que cambiar el planteamiento y ofrecer soluciones nuevas como nuestra propuesta de elevar la edificabilidad en los edificios donde sea factible para ganar vivienda pública en todos los barrios. Estamos en una situación de emergencia y no podemos utilizar fórmulas del pasado”, ha incidido.
Finalmente, ha defendido que en las zonas residenciales “no puede haber apartamentos turísticos y hay que afrontarlo con valentía. Los apartamentos turísticos tensionan el mercado de la vivienda y en València tenemos 10.000 apartamentos más los 5.000 más que Catalá quiere permitir y eso tiene un impacto tremendo en el precio de la vivienda. Mientras tanto, en Barcelona han decidido que no va a renovar ninguna licencia más de apartamentos y ese es el camino que debe seguir València”, ha dicho.
Bernabé, que también ha apostado por posicionar a València como una referencia en logística, transformación energética, innovación, comunicaciones, sector agroalimentario, ciberseguridad y de los semiconductores del vehículo elétrico, también ha reprochado a Catalá su militancia extrema del coche que ha disparado la contaminación y ha metido a València en el top 100 de ciudades con más retenciones.
“Si hace cuatro años hubiésemos tenido el caos de tráfico que hay en esta ciudad hoy con Catalá, no quiero ni imaginarme cómo estarían las portadas. La militancia extrema del coche de este Ayuntamiento llega hasta tal punto que nos vamos a gastar miles de millones en soterrar las vías del tren y Catalá quiere proyectar una autovía de cuatro carriles. València registra todos los años 450 muertes derivados de la contaminación. Es un asunto muy serio que el gobierno de Catalá haya hecho en movilidad una política negacionista que tiene consecuencias para la salud y económicas, porque los valencianos vamos a pagar un 60% más caro el bonobús por culpa de ese negacionismo del PP y de Catalá”, ha finalizado.
