Catalá se enroca en no negociar la ZBE y condena a los valencianos a pagar 115 millones
- María Pérez denuncia que desde el lunes, cuando se presentó la propuesta alternativa de la Zona de Bajas Emisiones, el PP no ha realizado ni un solo intento para buscar una solución
- “Catalá quiere creer que la factura no le va a llegar, pero sí que llegará por su irresponsabilidad y la tendrán que pagar los vecinos y vecinas de València”
La concejala socialista María Pérez ha exigido una vez más a María José Catalá que asuma su responsabilidad y se abstenga en el pleno extraordinario del próximo lunes en el que se vota la propuesta de los socialistas y Compromís sobre la Zona de Bajas Emisiones para evitar que los valencianos pierdan 115 millones de euros y paguen un 60% más caro el bonobús.
“El lunes los partidos de la oposición presentamos una propuesta conjunta con 16 votos, 16 votos que expresan con claridad un modelo de ciudad que sabe que no podemos seguir mirando hacia otro lado mientras la contaminación aumenta y supone ya un riesgo real para la salud pública. Pero desde entonces, la señora Catalá ha optado por ignorarlo todo. Ha despreciado esta propuesta y ha dejado claro una vez más que nunca había tenido intención de aprobar una Zona de Bajas Emisiones seria, ni de proteger la salud de los valencianos, ni de evitar que Valencia pierda más de 115 millones euros. Está enrocada en su negativa porque le dan igual los vecinos y vecinas de su ciudad que están respirando aire contaminado”, ha incidido.
La concejala socialista ha reprochado que desde el lunes no ha habido ni tan siquiera un intento de aproximación por parte del Partido Popular de Catalá para buscar un acuerdo. Una actitud que sigue la misma línea mantenida por el gobierno municipal desde que Vox comunicó que no iba a respaldar ni tan siquiera la falsa Zona de Bajas Emisiones que había pactado con el PP.
“Desde el pleno de octubre nos hemos reunido en una sola ocasión para intentar llegar a un acuerdo pese a las reiteradas ofertas de diálogo que ha realizado el Partido Socialista. Y ahora, con la propuesta conjunta que hemos lanzado, Catalá ni tan siquiera se ha pronunciado porque antes de leerla ya estaba justificando su rechazo”, ha continuado.
“La señora Catalá prefiere creer que esa factura no la alcanzará, pero esa factura sí que llegará y la pagarán los vecinos y las vecinas. El 1 de enero subirá de nuevo el precio del autobús y quizá ese día el Partido Popular entienda, por fin, que su mala gestión no la paga su gobierno, sino que la paga toda la ciudad”, ha criticado.
En este sentido, ha considerado que el próximo lunes, tras el pleno extraordinario, “quedará claro también quién está al lado de València y quién está al lado de su propio relato, porque la contaminación no se combate con excusas y los 115 millones no se protegen con titulares, se protegen gobernando. Y la señora ha renunciado a hacerlo, ha desistido sus funciones cuando esta ciudad más necesitaba responsabilidad”, ha finalizado.
