Catalá y Vox recortan cursos de la Universidad Popular y castiga barrios como el Cabanyal o Benicalap
Maite Ibáñez denuncia que en barrios como Russafa, Ayora o Natzaret se reducen los contenidos y en pueblos como Casas de Bárcenas o El Palmar desaparecen
La concejala del Grupo Municipal Socialista Maite Ibáñez ha denunciado que María José Catalá ha comenzado a desmantelar la Universidad Popular con la reducción de cursos y castigando a barrios como el Cabanyal, Natzaret o Benicalap. En estos términos se ha pronunciado tras la presentación de la programación de actividades de la Universidad Popular donde se ha aprobado que El Cabanyal pase de tener 17 actividades a 9, con la reducción de materias como inglés o la imposibilidad de formarse en pintura y dibujo.
Por su parte, Nazaret se queda a menos de la mitad de los cursos y Benicalap sufre un recorte de 22 a 15 cursos mientras que Marxalenes baja de 19 a 12. Ha indicado que El Palmar “directamente se queda sin cursar cultura general o gimansia”. Igualmente, ha llamado la atención sobre “el borrado” que según ha explicado “Catalá y Vox quieren hacer de la cultura valenciana”. “Una censura encubierta que elimina los cursos de la música tradicional, de tabal i la dolçaina, que se impartían en los centros de Ciutat Vella y Nazaret y que ya no formarán parte del curso que viene”, ha advertido.
También ha resaltado que en Les Cases de Bárcenas “ya no tendrán ninguna actividad, cuando antes contaban con un grupo de inglés”. En líneas generals, los cursos de la Universidad Popular se han reducido de 477 a los 471 actuales, con recortes que se centran en Russafa o El Cabanyal que han reducido los grupos de inglés de 3 a 1, mientras que el Palauet de Aiora pasan de 5 a 2, a pesar de que son barrios que demandan su estudio.
Maite Ibáñez ha explicado que su formación ha votado en contra por la “falta de un criterio riguroso en la programación” y porque “prima el sectarismo y el desprecio hacia los barrios así como hacia la cultura valenciana”. De la misma manera ha lamentado el “poco tiempo que se da para que las personas interesadas se puedan inscribir” lo que, en su opinión, “responde al nulo interés que tienen Catalá y Vox por promover la formación”.